Semana de niebla espesa en las cumbres más altas de las Sierras Subbéticas (Sur de Córdoba), gracias a nuestra estancia en la Posada Niña Margarita pudimos conocernos todo el centro de este Parque Natural y realizar varias rutas teniendo como centro neurálgico.
Muy interesante nuestros recorridos en cuanto a aves: Reyezuelos sencillos, petirrojos, colirrojos tizones, mirlos, lúganos, verdecillos, verderones, reyezuelos listados, pinzones vulgares, buitres leonados, gavilanes, zorzales comunes, zorzales charlos, pito real, pico picapinos, mochuelo europeo, rabilargos, mosquiteros comunes, carboneros comunes, carboneros garrapinos, herrerillos comunes, mitos, piquituertos, ratoneros… toda esta variedad se debe a la cantidad de hábitat diferentes por los que tuvimos la oportunidad de andar. Alta montaña, bosque de ribera, matorral mediterráneo, bosques de quercíneas, pinares y olivares.
En cuanto a fauna la atención sin duda se deriva a la observación que hicimos de un comadreja (Mustela nivalis), que un buen rato se paseó delante de nuestras caras de asombro, pues es la primera observación tan directa y buena que hemos tenido.
Al abrir el día y calentar el sol tras la humedad, los invertebrados también se dejaron ver y fotografiar perfectamente, hasta una cópula de caracoles y un imago de mantis sin alas (Apteromantis aptera), especie muy curiosa y endémica de la Península Ibérica.