Javier Pérez Mata
Muestra de la exposición «Campiña sevillana»
Tras estas fiestas y un poco de parón ya disponemos más tiempo para visitar exposiciones, aunque no muy contento con el trabajo realizado por la imprenta, invito a todo aquel que quiera pasar por La Lantejuela donde se exponen varias imágenes sobre la naturaleza y el medio rural de la ZEPA Campiña de Sevilla en el Aula de Naturaleza en el entorno de la Laguna del Gobierno. Durante un mes más se expondrá con visita abierta y gratuita.
Éstas son algunas de las especies que se pueden ver en la exposición fotográfica y en cualquier paseo por el entorno del Complejo Endorreico La Lantejuela y la ZEPA Campiña de Sevilla:
Datos sobre las Avutardas de Andalucía
La especie estrella en el pasado Congreso sobre aves esteparias es sin duda la Avutarda común (Otis tarda), mundialmente en peligro de extinción y en Andalucía cuenta con uno de sus mejores refugios aunque su categoría de amenaza llegue a ser: en Peligro Crítico de Extinción (CR). Este dato no es muy esperanzador teniendo en cuenta que la políticas agrarias y el flujo de los mercados nos encaminan a una agricultura insostenible, con una nueva amenaza para las especies protegidas, las especies cinegéticas, la conservación del suelo, las aguas, la biodiversidad en general, el empleo en el mundo rural y la calidad de nuestras cosechas; como es el sistema de olivar intensivo.
Sin entrar en datos biológicos sobre la especie, es bien sabido que es el ave voladora más pesada, el artículo se centra más en las características de la población andaluza y más concretamente en la de la ZEPA Campiñas de Sevilla.
En general sólo un 15% de los machos de Avutarda logran reproducirse en el LEK de esta ZEPA, el núcleo reproductor más importante de Andalucía, eso sí, el macho que se aparea lo hace con varias hembras. Se estima que una tercera parte de la población total andaluza se reproduce aquí.
El calor tan sofocante de nuestro verano estimula a los grandes machos, con más capacidad de vuelo que las hembras, a migrar a zonas más altas, como a Badajoz. Convirtiéndose Extremadura en el destino preferido, se ha demostrado una conexión genética entre la población de esta Comunidad con la población de la ZEPA Alto Guadiato, al noroeste de la provincia de Córdoba.
La estimación de sexos que existe en Andalucía, según los últimos censos, es de 2´4 hembras/macho. Es una proporción de sexos algo baja en lo que se refiere a hembras. Por lo que la pérdida de alguna hembra resta posibilidades de que la población se recupere. Estos parámetros y censos realizados demuestran que la especie se encuentra en condiciones óptimas para mantener su estabilidad a corto-medio plazo, debemos luchar por una estabilidad permanente.Una buena noticia es que, tras el seguimiento de la población en la ZEPA Campiñas de Sevilla, se ha demostrado una tendencia ascendente de la población. En ciertos grupos más pequeños y alejados de las dos ZEPAs andaluzas más importantes para la Avutarda, el decrecimiento de las poblaciones parece detenerse. Especial atención se merece el cambio climático, puesto que se trata de una especie muy sensible al gradiente climático, lo que podría influir a su conservación.
La mayor causa de mortalidad directa, en torno al 13%, es debido a colisiones con tendidos eléctricos, esto sucede en ciertas zonas muy localizadas.
Aun con estos datos, el factor de riesgo más importante al que se enfrenta la especie es la alteración del hábitat. La Avutarda se a adaptado perfectamente al medio agrario, un medio que ha cambiado en los últimos años, y es que durante 50 años se ha ido inculcando una agricultura de productividad a toda costa. Es necesario armonizar agricultura y biodiversidad.
En Andalucía hay suficiente hábitat potencial que podría potenciar la expansión de la especie y la conexión entre grupos aislados, para ello son imprescindibles las medidas agroambientales y de conservación, además de conseguir que todos los profesionales del entorno agrario se involucren y colaboren, siendo este punto el más esencial para que esta especie y decenas de especies más puedan avanzar.
La agricultura ecológica y la agricultura de conservación son dos sistemas que ofrecen una buena oportunidad para compatibilizar medioambiente y agricultura. En estos momento existe una ligera recuperación de la Avutarda en Andalucía, pero este tipo de agricultura podría ser la solución y el esfuerzo de los profesionales que luchan por salvar la especie sería menor, esfuerzo que muchas veces parece en vano frente al interés económico.
No debemos olvidar que «Lo que es bueno para la agricultura es bueno para las aves y lo que es bueno para las aves es bueno para la agricultura».
Exposición fotográfica en La Lantejuela
De aves por Doñana
Tarde la entrada sobre un fin de semana pasado ya. Con un resfriado muy potente y tras varios días de Congreso de aves esteparias no me puedo resistir a una jornada de aves por Doñana, con buena compañía y buenos bocadillos. Tiempo muy frío pero muy rico en aves, aun presentes las Cigüeñas negras (Ciconia nigra), Aguilillas calzadas (Hieraaetus pennatus), Culebreras europeas (Circaetus gallicus) y algún Cernícalo primilla (Falco naumanni) que una de dos: o vienen más del norte y se quedan en nuestra tierra; o aún no han cruzado en su migración hacia el sur.
Destaca, como no, los cientos de Ánsares comunes (Anser anser) y Grullas comunes (Grus grus) que vuelan de alli para acá y se alimentan en las vastas extensiones. En todos los canales y zanjas inundadas se dejan ver Garzas reales (Ardea cinerea), Garzetas comunes (Egretta garzetta), etc.
En los postes y posaderos no es raro ver al Cernícalo (Falco tinnunculus) o al Ratonero (Buteo buteo). Sin más rollo, lo mejor es que las fotografías resuman la jornada:
Nuevo hide en Estepa
Como un niño pequeño esperaba ese día, un compañero y yo habíamos quedado para probar nuevas localizaciones para fotografiar aves en la Sierra de Estepa y dejar un puesto más o menos fijo en ese emplazamiento. Zona en la que se encuentra nuestra estación de seguimiento de aves.
Noche ociosa la del sábado, así que un poquito tarde se me hizo… Aun así en el primer lugar que instalamos la tela de camuflaje nos quedamos, asombrados de la facilidad de entrada de las aves. Teniendo en cuenta que es imposible que nos mantuviéramos en silencio, mucho que contar y bastante sin vernos, con el posadero improvisado de una rama de almendro que sobresalía de la masa arbórea no dejaban de posarse en primer lugar, y con su nerviosismo característico, mosquites comunes y currucas (cabecinegras y capirotadas) y tras ellos los colirrojos tizones, petirrojos, pinzones vulgares, piquituertos, carboneros y herrerillos (por ahora comunes) y no faltó algún mirlo que intentó entrar a hacernos compañía en el puesto.
Considero la media mañana dedicada a esto un éxito, deseando volver y realizar una jornada en condiciones. La ilusión de un crío en Navidad esperando regalos.
Nidal para Mochuelo europeo
Es diciembre y la mayoría de nuestras aves nocturnas comienza con el celo y a buscar nuevos territorios. Pero en el caso del Mochuelo europeo (Athene noctua) el buscar nuevos territorios le resulta difícil porque su medio está cambiando, cada vez desaparecen los mosaicos de cultivos plantando olivares en intensivo, desapareciendo los grandes olivos lechines y encinas con huecos dónde anidar, y la opción de construcciones humanas tampoco les sirve de ayuda por el deterioro de antiguos cortijos.
Por ese motivo es bueno, en la medida que podamos, ayudar un poco a la naturaleza, yo he optado por colocar nidales para mochuelos, a parte de prescindir de fitoquímicos en la finca agraria, también intento crear un simple hueco dónde se encuentren seguros. Si anidan otras especies como Abubillas serán bien recibidas.
Esto no deja de ser una pequeña orientación inspirado en el modelo de caja nido que elaboro. De hecho hay diferentes modelos que se pueden conseguir o comprar. Lo que sí es importante es la localización:
- Con tendencia al norte y evitando fuertes vientos
- Situadas a una altura alejada de curiosos o depredadores
- Colocar en el interior algún material como serrín
- No atornillar al árbol
Congreso Internacional Aves Esteparias
En puertas de finalización del Proyecto Life esteparias se ha celebrado el Congreso Internacional: Zonas de Especial Protección para las Aves: espacios de oportunidad.
Esta iniciativa andaluza apoyada por la Comisión Europea a través del Life ha estado trabajando duro con los agricultores, población del medio rural y las aves en varias ZEPAs de Andalucía, entre ellas Campiñas de Sevilla, Alto Guadiato y Lagunas de Campillos y Fuente de Piedra. Esto espacios tienen la suerte de conservar especies tan amenazadas y delicadas como la Avutarda, el Sisón, el Aguilucho cenizo entre otras. Esto a sido posible gracias a un manejo del entorno agrario sostenible de generación en generación. Preocupa el giro en los mercados y políticas que hacen peligrar este equilibrio. Durante 50 años se ha ido inculcando por parte de técnicos y de la administración una cultura de productividad a costa de los recursos naturales. Es necesario compaginar agricultura y biodiversidad.
La Avutarda (Otis tarda) a sentido una ligera recuperación en Andalucía, pero hay que ser prudentes, hay muchos factores que dependen de su conservación que se unen a que es una especie que le influyen el gradiente climático, le afecta el cambio climático.
Como conclusión del congreso cabe destacar los acuerdos que se van a tomar establecerán unos objetivos ambientales claros y duraderos en el tiempo. Teniendo a la Agricultura de Conservación como la alternativa para compatibilizar medioambiente y agricultura.
Chochín común
Troglodytes troglodytes. Cuando veamos o intuyemos un ser pardo moviéndose por las partes bajas de los arbustos y la maleza. Compite con el Reyezuelo en optener el título de ave más pequeña de nuestras fauna, aunque en época de cría el torrente de voz del macho sorprende a quién lo oye, fiero defensor de su territorio. Es el único momento dónde machos y hembras se diferencian puesto que son idénticos en plumaje.
Su nombre científico, que significa cavernícola, se refiere a su hábito de entrar en cavidades y huecos para pasar la noche o buscar insectos.
Parque Natural Sierras de Cazorla, Segura y las Villas
Al naturalista de pura cepa no le asusta el frío, ni la lluvia, ni pierde la oportunidad de la aventura en la montaña. Tras pasar una semana fotografiando y viviendo el Parque Natural de Cazorla, Segura y las Villas uno no se cansa de admirar el paisaje que día a día te sorprende y asombra. Cambiante a lo largo de las estaciones, y cambiente a lo largo del día.
Esta Reserva de la Biosfera es todo un monumento de piedra caliza. Roqueros, montes, bosques y riberas incluyen una gran variedad de flora y fauna, entre ellos varios endemismos único en el mundo, además de especies de interés cinegético. El turismo de naturaleza y el cinegético se encuentran en este espacio en armonía, siendo el que más amenazas origina el abuso del turismo.
Todas las mañanas amaneciendo bajo cero y conservándose la nieve durante toda la jornada hace la fotografía de naturaleza y poco dura. Sin guantes no hay quién aguante pero con ellos no se puede pulsar el disparador, qué gran dilema. Tardes y noches largas en el refugio con un buen vaso de poleo caliente, menos mal que la experiencia en la montaña sirve de algo…
Entre las especies observadas no se encuentra el deseado Quebrantahuesos (Gypaetus barbatus), no le puedo reprochar nada: demasiado frío, y más en las alturas. Chochín común, Cuervo, Buitre leonado, Águila real, Trepador azul, Carbonero garrapinos, Carbonero común, Herrerillo capuchino, Reyezuelo, Mirlo acuático, Petirrojo, Colirrojo tizón, Mosquitero común, Cárabo, Gavilán, Focha común, Zampullín común… algunas de las especies de avifauna observadas.
Entre los mamíferos no es difícil encontrarse con Ciervos (Sobretodo hembras con sus respectivas crías), Jabalíes, Muflones, Cabras montesas, Ardillas, Garduñas, Zorros y muchos Gamos, aunque no tienen en estos momentos su pelaje tan característico.
No sólo con fauna disfruta uno… la flora es extraordinaria: Tejos milenarios, extensos bosques de Pinos salgareños, Serbales, Quejijos, Fresnos y Arces con tonalidad otoñal, Acebos en plena fructificación, enormes Hiedras que envuelven a sus «árboles soportes», y así hasta llegar a enumerar prácticamente la totalidad de especies de una guía de flora.
Sin lugar a dudas lo que me llevo de estas experiencias son los buenos ratos en la mejor compañía, aprender, ayudar y disfrutar en un entorno sin igual.