Ruta de largo recorrido en plena montaña escocesa: An Teallach. Forma parte de un macizo montañoso al suroeste de Dundonnell. El pico que le da nombre a estas montañas mide 1.062 metros.
Estas montañas tienen profundos barrancos bastante inclinados y, colonizando las cumbres, unas crestas rocosas afiladas. Para hacer cumbre lo recomendable es para la noche tomando como centro base el refugio de Shenavall.
Adentrase en estos paisajes es volver a otra época, muestra de ello es la cabra cimarrona, especie ya salvaje, con un aspecto prehistórico. Además multitud de ciervos, corzos, águilas reales, chovas piquirrojas, bisbitas arbóreas, cernícalos vulgares, tarabillas y, por supuesto, lagópodo escocés, una subespecie endémica de estas tierras. En estos momentos del año se encuentra con un plumaje totalmente críptico para camuflarse entre los brezos y pastizales donde habita.
Es un ecosistema permanentemente encharcado por lo que es un medio muy apropiado para las plantas carnívoras, como la Drosera rotundifolia, bastante abundante durante todo el sendero. Esta planta atrae a los insectos de los que se alimenta mediante su atractivo color rojo y unas gotas de una sustancia pegajosa y dulce (Mucílago). Se ha adaptado a esta alimentación por vivir en terrenos de turberas, pobres en nutrientes y ácidos.
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Entradas sobre la Naturaleza en Escocia:
Viaje a Escocia I. Parque Nacional de Caingoms
Viaje a Escocia II. Ruta costera y Orkney Island